27 julio, 2006
cómicos
sentados en unas pocas sillas, en un descampado... cambiándonos de ropa junto a unos cubos de basura. yo estaba enfermo. alberto estaba descojonado. los demás un poco nerviosos. todos nos preparábamos para salir a hacer reír a dieciséis personas de un pueblo de la Mancha. un público difícil.
cuando me tocó actuar, me encontraba tan mal que creí que iba a vomitar encima de esos dieciséis.
pero las risas sonaron, y me curaron. poco a poco me fui sintiendo mejor. y detras del escenario, en el lugar donde nos cambiamos de ropa, oliendo a basura, enfermo y cansado, era triste. pero cuando salía, hacía reir.
si sólo pudiéramos, cuando nos estemos muriendo, hacer reir...
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10 comentarios:
El comentario tiene un tono derrotista hacia un fracaso encontrado. Sabor agridulce de un viejo chaplin en Candilejas.
Al final todo se resume con una buena patada a un foco que andaba perdido en proscenio.
Yo me quedo con el tono de esperanza y con el foco desterrado...
Hay que hacer reir al mundo, que se levante y aplauda, que griten, rían...y lloren...que se emocionen, sino seguirá igual de muerto.
Os quiero mi Watabata ^^
...que viva el teatro.
Ellos que viven bajo los focos clamorosos del éxito y poseen suaves descapotables y piscinas de plácido turquesa con rosales y perros importantes y ríen entre rubias satinadas bellas como el champán... pero no son felices,
y yo que no teniendo nada más que estas calles gregarias y un horario
oscuro y mis domingos baratos junto al río con una esposa y niños que me quieren tampoco soy feliz...
... Perdóname, esperanza acosada, por reírme a veces.
...hacer reir esta de PUTA MADRE (dicho con tono "ewan-mcgregor/marc-renton al encontrar sus supositorios en el wc") pero... y quien te hace reir a ti?...
Me muero... ¡¡Me mueeeeroooo!! Arghhh...
...
... ¡Postdata!
normalmente, cuando hago reir a alguien de forma premeditada, existe en esa acción cierto acto de auto-demostración de mi propia incapacidad para reir en ese preciso momento. sé que suena horrible, pero nunca dije que fuera una persona maravillosa.
No sabía cómo decirte esto pero...
... A veces Chaplin me recuerda a mi perrito Totó.
Tío, ríe, llora, ama. A veces reimos para demostrarnos cuánta disociatividad escondemos en nuestro alter-ego melancólico y nos olvidamos de reir nosotros. La tangencialidad de la vida no está ahí para nada, se un héroe, ¡combate!, ríe muriéndote, haz caca mientras cuentas un chiste o comes turrón con tu abuelita.
No te rindas a la fogosidad de tu entropía... Como dijo mi padre, chupándome el pene.
¡¡Muerte por kikiiiiiii!!
El olor a basura es a veces el olor dela vida,pero es trabajo de los cómicos que momentaneamente se nos olvide para poder disfrutar del resto de olores.Aunque solo seamos dieciseis somos suficientes si sabemos apreciarlo.¡Continúa!
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